lunes, 20 de febrero de 2012

MÁSCARAS EN LA NOCHE

Todo el mundo a mi alrededor baila desenfrenadamente y sin control; gritos, saltos, risas y máscaras, muchas máscaras.
Rodeada de personas desconocidas bailo al ritmo de la música sin pensar en los demás, la máscara me permite ser libre, me permite ser yo y así sin darme cuenta, me cruzo con el que probablemente es el hombre más guapo que haya visto jamás.

Su disfraz de policía va acuerdo con su antifaz color azul marino y sus ojos, aun y estando eclipsados por la máscara, brillan con una intensidad deslumbrante. Su mirada se traba en mis ojos y no deja que me vaya, aunque tampoco quiero moverme, solo deseo seguir mirándole. Se me acerca lentamente con la mirada fija y cuando llega a mi posa su mano en mi cintura y empieza a moverse lentamente. Sin darme cuenta, la música ha dejado de ser desmadrada y loca  para convertirse en una balada que empareja las máscaras. Levanto los brazos y rodeo su cuello, me acerco a él y reposo mi cabeza en su hombro; Siento su lenta respiración tranquila y pausada, todo lo contrario a la mía, que cuando más cerca le noto más se acelera junto con los latidos de mi corazón.
Empiezo a sonreír sabiendo que no lo percibe porque deseo que esta noche no acabe nunca, o si por el contrario tiene que finalizar, espero que él esté a mi lado hasta que veamos como el sol despunta por detrás de las montañas.


1 comentario:

  1. El dia que comprengui com pots arribar a escriure tan i tan bé, t'avisaré.
    Cada escrit, cada paraula, cada títol... tot. M'impulsa a meravellar-me cada vegada més...

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